miércoles, 23 de noviembre de 2011

Porque no te quise, te sigo queriendo.

Porque sabes que le quieres. Poque, cada sonrisa, cada mirada que acaba en el suelo o de reojo, cada salto que te da el corazon cuando su voz transpasa tus oidos, cada enredo que tu pelo tiene gracias a el, cada "para quieto, dejame un poco" pero no quieres ni que pare ni que te deje, quieres que no te suelte que te abrace y que te diga que le importas. Pero despiertas y te das cuenta de que solo quiere jugar contigo como ya lo habia hecho antes y entonces decides "pasar de él" y te das cuenta de que ya es demasiado tarde. Porque ya estas enamorada.
Porque esa sonrisa,
te delata.